Don Roberto Cantoral es uno de los compositores más inspirados de la música mexicana. Todas sus canciones han sido legendarias. Tenemos el honor de presentar El reloj, con uno de los pintores oaxaqueños más destacados del momento: don Maximino Javier.

El Reloj describe de una manera muy poética esa sensación de ansia, desesperación, ante ese enemigo del amor: el tiempo. Quisiéramos poder manipular el tiempo, cuando estamos enamorados o cuando queremos estar con alguien. Maximino evoca con su lenguaje plástico, de una pasión enorme por la naturaleza. Nos dice cómo abordó la misión de dibujar la canción: “Pues le di muchas vueltas. Tuve que imaginarme muchas cosas, para poder realizar, para no basarme solo en la letra de la canción, sino en algo que también fuera con mi forma de expresarme. Entonces salió este dibujo, que es un trabajo realizado a tinta china”.

 “Reloj no marques las horas porque me voy a enloquecer”.

Sentir la música es algo muy íntimo, nos dice Maximino: “Cada quien que escuche la melodía puede interpretarla de diferente manera, entendiendo que todas las cosas tienen su final. Hay un poco de esa desesperación del tiempo, de que se va acercando el final, llámese una relación amorosa o algo que no funcionó. Esa angustia de la rapidez del tiempo. Eso me puse a pensar para realizar mi trabajo”.

En la obra de Maximino, la música está muy presente, hay bailes, músicos, animales. Está la naturaleza y está muy presente el amor. Sus personajes se besan, se aman. Maximino nos habla de sus temas: “Mis personajes nacieron a partir de un libro, que me regalan cuando estaba en el Taller Rufino Tamayo, un libro de Brueghel. Me di cuenta, en ese libro, que los personajes de este excelentísimo maestro, son campesinos. Yo siempre andaba como muy nostálgico, porque salí del pueblo, y ya no estaba en ese medio del pueblo. Entonces me puse a imaginar a mis personajes, a la gente del campo, a los animales y la forma de vivir de las personas. Poco a poco fueron naciendo esos personajes que tengo, entre jarocho, de Oaxaca y así. Esa relación, donde campo, animales, trabajo, etc., es lo que ha enriquecido mi trabajo realmente”.

El arte es un lugar diferente, nos dice Maximino: “Mi trabajo no es precisamente una fiesta, uso mucho estos personajes, con algún instrumento, porque se presta mucho a la plástica. A mí me va creando ese mundo que manifiesto en el cuadro, es como si yo estuviera con un grupo de personas y veo que esas personas tocan algún instrumento, otros bailan, otros vuelan. Es ese mundo que trato de manifestar en mi trabajo”.

Maximino recuerda cuando escuchó El reloj, de don Roberto Cantoral: “Pienso que es de las primeras canciones que uno escuchó de niño. Las escuchaba mucho en la radio. Pues es parte del crecimiento de uno, un poco con estas melodías de Roberto Cantoral o de otros autores. El tiempo es algo que se puede manifestar de distintas maneras de acuerdo a tu necesidad. A veces, por ejemplo, cuando vas a algún lugar de la ciudad, que tienes una cita, y llevas bastante tiempo, pues va transcurriendo muy lento. Pero si vas ya muy cortito de tiempo, el tiempo también se vuelve más rápido. Es de acuerdo a como uno lo vaya tomando. Porque de niño el tiempo es muy lento. Cuando uno es niño y viene una fiesta, y quiere uno estrenar la camisa o el zapato, el tiempo se va muy lento. Pero cuando uno es niño, uno no tiene noción del tiempo”.

El arte tampoco, El reloj hizo inmortal a don Roberto Cantoral, el dibujo del Maximino Xavier, con sus personajes intemporales, se une a la leyenda de una canción.

El reloj
Tinta china sobre papel
50 x 30 cm
2020

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